Hacer una ensalada completa, sana y deliciosa parece, de mano, la cosa más sencilla del mundo, pero ¿cuántas veces nos hemos plantado delante de la nevera o de la mismísima  frutería y no hemos sabido por dónde empezar? ¿O cuántas de todas esas veces te ha terminado saliendo una ensalada poco apetecible?

Y es que las posibilidades para hacer una ensalada parecen infinitas, pero seamos sinceros: si no queremos acabar mezclando ingredientes al tun tun hay que seguir ciertas pautas.

Para nosotros una buena ensalada tiene que tener tres características básicas: tiene que ser completa, apetecible y ya que nos ponemos, deliciosa. Te explicamos cómo:

  • Productos de temporada.

Es importante contar con ingredientes frescos y de temporada que frente a los que no lo son aportan un extra de sabor y de calidad. Nuestra dieta mediterránea nos brinda un abanico enorme de posibilidades, no te quedes solo con  los ingredientes clásicos de la ensalada mixta, ¡imaginación al poder!

  • Ensalada completa.

Para conseguir una ensalada completa necesitamos incluir al menos un ingrediente de cada grupo de alimentos. No te límites a las verduras y hortalizas, vuestras ensaladas ganarán mucho nutricionalmente si cuentan con aporte proteico (pollo, huevos, jamón serrano…). Prueba también a incluir un aporte de hidratos de carbono complejo como la quinoa o el arroz integral por ejemplo, y añádele alguna fruta, le aportará además de todas sus ventajas nutricionales un toque muy fresco. Los frutos secos, además, aportarán grasas saludables y un punto crocante muy interesante.

  • Combina texturas y contrasta sabores.

Lo más crunchy con lo más suave, de esta manera ayudarás a la sensación de saciedad y de comer algo  mucho más contundente.

Con respecto a los sabores, todo va en gustos, nuestra recomendación es que combines cosas que te gusten eligiendo algún antagónico, por ejemplo un toque dulce casa muy bien con un sabor fuerte, por eso  el queso de cabra queda tan bien con unos pimientos rojos asados o unas uvas.

  • Condimenta con gusto y cabeza…

Si nuestro propósito es crear una ensalada completa y no demasiado calórica cuidado con el aliño. Una salsa comercial convencional podría arruinar todo el trabajo hecho, ya que en muchas ocasiones están llenos de azúcares y grasas que no necesitamos.

Te recomendamos opciones más naturales como hierbas aromáticas y especias, aceite de oliva, limón, yogurt… o una mezcla de estas últimas. Puedes darle un toque interesante a tu ensalada mezclando unas semillas de mostaza con un chorrito de aceite de oliva y media cuacharadita de miel, riquísimo!

  • Que entre por los ojos.

Si tu ensalada es un batiburrillo de ingredientes mezclados de cualquier manera será mucho menos apetecible, elabora una buena presentación, coloca cada ingrediente con mimo y el resultado cambiará por completo.

Puedes aprovechar también para cortar los ingredientes de una forma menos arbitraria, si cuentas con los utensiliosa propiados crea diferentes formas, utiliza mandolinas para cortes muy finos, o haz bastoncitos, cubos, espaguetis de verdura…solo tú sabes cómo hacer que tu ensalada perfecta resulte la más bonita del mundo para ti 😉

Esperamos que estos pequeños trucos te ayuden a mirar las ensaladas con otros ojos, y que saques el máximo partido. Damos fe de que una ensalada puede ser un plato absolutamente atractivo, si quieres un ejemplo de lo que te hemos descrito anteriormente ven a vernos, tenemos algunas muy especiales para ti!